Las Cruces: that feeling!

Dice mi buena amiga M., que Las Cruces es un lugar mágico. No se equivoca. También me dice que realmente LC está suspendido en algún lugar en el espacio. Y yo diría más: LC es un sentimiento, un estado de ánimo.

Recuerdo el primer día que vine, la sensación de horror que me embargó al bajarme de un autobús en el que viajaban hasta gallinas. Era de noche pero yo intuía que aquello que las pupilas no alcanzaban a ver era muy distinto a la vieja Europa que tan atrás quedaba. No me equivoqué.

Desde entonces pasé un tiempo con sentimientos contradictorios hacia esta ciudad del desierto, y un día me di cuenta que la magia de New Mexico y su "wilderness" me habían alcanzado.

Fue un frío día de invierno, de vuelta ya en la ruidosa Europa, detrás del cristal de una ventana donde me arrimé en busca de cuatro miserables rayos de sol invernales. Cómo extrañé entonces este sol y el calor! Recordé la sensación de paz y calma que siempre rodea mi vida aquí, y de nuevo tomé la maleta de vuelta hacia la tierra del encanto, o encantamiento?

Un amigo asegura que todo el que pone un pie en estas tierras está condenado a volver. La maldición de LC le llama. Tened cuidado, sobre todo si tenéis el corazón abierto esperando un milagro cada día.

[Foto: Parque de Mesilla - Agosto 2010 - Autora: Ana Alejos ]